Entendemos la integralidad cuando incluimos todas las áreas que involucran a la persona: su salud o situación física, su bienestar emocional y su interacción con el medio social. No realizamos de manera exclusiva un servicio asistencial, construimos un camino de bienestar a partir de las capacidades y posibilidades reales que tiene cada persona y su entorno.
El trabajo que realizan nuestros profesionales del cuidado y lo que no hacen. Las actividades a realizar por el cuidador en el domicilio son fruto de una evaluación personalizada que busca identificar las necesidades de cada usuario y priorizarlas, además de integrarlas con aquellas actividades que favorezcan el desarrollo de capacidades residuales, de autonomía y de bienestar en general. Por esta razón cada actividad se diseña con objetivos muy concretos, identificando claramente lo que hace y no hace el usuario y su cuidador.
P Plan como la hoja de ruta que nos trazamos a la hora de intervenir con nuestros usuarios y sus familias. Esta hoja de ruta o mapa nos acompaña durante todo el proceso y nos guía para no perder de vista nuestras metas y objetivos.
P Personal porque el centro y la finalidad de nuestro trabajo son las personas. Intervenirnos por y para ellas. Creemos firmemente en su autonomía, en sus capacidades y en que es posible lograr vidas con calidad, bienestar y felicidad.
C Cuidados porque nos ocupamos de atender, acompañar y procurar todos aquellos apoyos materiales y humanos que las personas necesitan para desarrollarse de la manera más autónoma y activa posible en su vida diaria.
El Plan Personal de Cuidados (PPC) es diseñado por un equipo multidisciplinar conformado por médicos, enfermeros, psicólogos, trabajadores sociales, terapeutas, fisioterapeutas, logopedas y cuidadores. Realizamos a cada usuario una valoración pormenorizada, aplicando escalas y métodos de observación que nos permiten definir necesidades de intervención de manera clara y prioritaria. Este PPC se diseña y construye con el usuario y sus familias, se revisa y evalúa periódicamente.
Los objetivos que se establecen siempre serán ambiciosos pero realistas y posibles, de tal manera que podemos comprometernos con su cumplimiento; sin olvidarnos del trabajo continuo que realizamos para coordinar tanto las actividades a realizar como la información a todos agentes involucrados.
Contamos con un modelo integral de valoración geriátrica, que permitirá establecer un plan individual por objetivos orientados a potenciar capacidades y favorecer el bienestar. Este es uno de los aspectos más importantes de nuestra oferta de valor, que nos diferencian de otras entidades prestadoras del servicio. Nuestro objetivo es que el usuario y su familia cuente desde un primer momento con un equipo humano especializado que valora, interviene y acompaña durante todo el proceso, buscando obtener los cuidados profesionales que tendría en un centro residencial, pero desde la comodidad del propio hogar.
No podríamos ofrecer un servicio integral si no participamos en el proceso de formación. Para Laburo resulta fundamental los procesos de formación continuada, por lo que todas las personas trabajadoras que presten el servicio como cuidadores reciben formación en diferentes disciplinas, desde su incorporación en la entidad promotora y en el puesto de trabajo.
Los familiares directos e involucrados en el cuidado de la persona mayor son de especial importancia en nuestro modelo. El PPC incluye una guía de cuidados para el familiar de personas mayores y/o dependientes y unas actividades formativas periódicas relacionadas con el autocuidado físico, emocional y sociofamiliar. Estas acciones buscan promover el bienestar y disminuir las cargas psico-emocionales de la labor de cuidado familiar.
Todas las actividades están pensadas en potenciar las capacidades del adulto mayor, su autonomía e independencia. Si bien el modelo de cuidado que proponemos busca apoyar al usuario y a su familia en aquellas actividades que no se pueden realizar de manera autónoma, centramos nuestra labor en su participación activa, fomentando la mejora de habilidades, destrezas y sentimientos de valía personal.
La familia o el adulto mayor recibirá mensualmente, los reportes de PPC. Este último consiste en mostrar gráficamente los valores recolectados en las mediciones, permitiendo realizar un rápido análisis del comportamiento fisiológico del paciente.